Hace algunos días no escribo: he estado bastante ocupado y claro, ahora tengo mucho por contar.
Empezaré recordando el miércoles, el último día de mi tía Ana Lucía -que debería haber regresado hoy a Bogotá después de un muy largo viaje- con nosotros. Ese día ella estuvo de visita en Abu Dhabi y de allí me trajo un pijama; un regalo muy oportuno, porque mucha ropa me está quedando ya pequeña. Por la noche, para despedirla, fuimos a cenar en el Walk de JBR en un restaurante sirio, Sarai, que nos gusta mucho. Mamá y mi tía apenas tenían apetito, así que papá acabó comiendo un montón. Al volver a casa, mamá encontró un regalo que le habíamos dejado preparado: desde que nací quería haberle dado un detalle con ocasión de mi nacimiento, pero hasta entonces no había tenido oportunidad de hacerlo.
El jueves me desperté con mi tía despidiéndose cuando papá la iba a llevar al aeropuerto. Me quedé en casa con mamá, los dos solos, con cierta tristeza por su partida pero felices también de haber gozado de su compañía durante casi un mes; su ayuda ha sido impagable y su dedicación -sacrificando incluso la posibilidad de haber conocido mejor este lugar tan lejano- una verdadera muestra de amor. Espero que lo haya pasado bien, que se haya llevado un buen recuerdo y que sepa que la quiero y la voy a echar mucho de menos. Lo bueno de su regreso es que va a poder contarle a mis abuelos y al resto de la familia en Bogotá lo bueno que soy, que lo lindo que me veo en las fotos no es solamente por una buena selección, sino que soy realmente guapo, y sobre todo que mis papás están felices conmigo y muy contentos viviendo en Dubai. Así, si mi tía les cuenta que estamos muy bien aquí, confío en que todos estén más tranquilos y espero que más gente se anime a venir a visitarnos.
Creo que no nos irá mal por nuestra cuenta: yo ya me porto un poco mejor y estamos empezando a ser capaces de establecer una rutina. Además no vamos a estar mucho tiempo solos, pues mis abuelitos vendrán en unas semanas, y dentro de pocos meses tenemos previsto viajar a Colombia para conocer a otra parte de la familia y tantos amigos que han estado pendientes de mí.
El jueves por la tarde vino a casa a visitarnos Fanxi, una amiga de mamá que hace poco ha venido a vivir a Dubai. Me trajo de regalo un pollo de peluche que hace unos ruidos muy divertidos: lo voy a poner en el coche para no aburrirme durante los largos viajes que a veces tengo que hacer con mis papás.
Así comenzó nuestro primer fin de semana en familia, solos. Hemos estado tranquilos, en casa. Yo he estado un poco inquieto, no sé si me duele un poco la panza o si es por lo rápido que estoy creciendo... pero estoy comiendo bastante y algo desordenado, y me cuesta un poco dormirme. Afortunadamente para todos, de cualquier manera, en las noches sí he podido dormir bien y largo.
Ayer por la tarde conocí por videoconferencia a Sergio, el amigo de mis papás que vive en Barcelona y con el que tantos vínculos los unen. Él es como un tío para mí y espero que con Mónica -a quien no pude ver ayer- tengan pronto un niño para que pueda jugar con él en Clubau y en muchos otros sitios. Y si fuese niña, seguro que también jugaría con ella y nos divertiríamos mucho.
Con quienes también tengo muchas ganas de jugar son mis primos Carol y Santi. Ahora están en Madrid, qué pena no poder estar todos juntos. De regalo, para que al menos sientan que cantamos juntos, les he mandado la colección de Canticuentos, que son las canciones con las que crecieron nuestros papás.
Hoy el resto del día lo hemos pasado en casa organizando y he aprovechando para tomar un buen baño y para cortarme las uñas, que ya se estaban convirtiendo en garras y a veces, sin quererlo, me he arañado la cara y también rasguño a mi mamá.
Querido Emilio,
ReplyDeleteMe sorprende enormemente lo bien que escribes, de hecho a tu corta edad dudo que mucha gente lo pueda hacer como tú. Eso debe ser herencia de tu madre, la calidad del lenguaje y la inteligencia me refiero, la cantidad es sin duda de tu padre que no calla ni debajo del agua. Me alegro mucho de que tus primeras semanas de vida sean todo bondad y felicidad, ya vendrá alguien o algo que lo estropee (se me ocurren muchos ejemplos pero de momento con ZP será suficiente), disfruta tu niñez a tope.
Tengo muchas ganas de pasar un rato contigo, hay varias cosas de las que te tengo que hablar porque tus padres no lo enfocarán bien y es alguien como yo quien debe hacerlo; cuando tenga el consentimiento paterno, mejor dicho materno que es más "juisioso" aunque tardará en llegar mucho más, para compartir una cerveza bien fría contigo tendremos esa conversación... Yety y Excoba ya te hablarán de otras cosas´, como bien ha dicho tu papá cada uno tenemos lo nuestro.
Cuida de tus papás y no dejes que KungFu Panza, él te explicará el significado de eso, pierda más peso, no lo reconozco tan flaco, ¡que oso tan grande!
Otro consejo: cuando tu mamá hable de nosotros y le oigas decir "ellos a metros de mi Emilio" no le hagas caso, no lo consiguió con tu papá (seguimos ahí haciendo el cafre a tope) ni con ella, ¡lo va a conseguir contigo! El fin y al cabo tampoco somos tan malos y ella lo sabe, ¡por eso nos queremos tanto todos!
Un beso a toda la familia, ¡sin mariconadas!
Jaime
Hola Emilio
ReplyDeleteLe he contado a tu familia de Bogotá lo bien que te portas, lo bien que están y lo guapisimo que eres - y que no es por la buena cámara de tu papa!!!- Por supuesto les hable de los dias maravillosos que estuvimos juntos.
Disfruta del regalo de la tía Anda Lucia!!! -como dice tu papá-.
Espero verte muy pronto. Te adoro